Observen con atención la extraña imagen obtenida en Villa Verdi el 31 de octubre de 2000, por una prestigiosa fotógrafa española con su cámara analógica. Examinen los detalles: su rostro, sus manos sobre el teclado, su figura sobre el taburete. No hubo truco ni reflejos. Si quieren saber lo que ocurrió, sigan leyendo y recurriendo a los enlaces. Las imágenes que se ofrecen han sido posibles gracias a la desinteresada colaboración de un laboratorio madrileño, Fotosíntesis, del ilustrador y dibujante Juan Berrio y del ingeniero Francisco García Leal. Este último es quien ha llevado a cabo la elaboración de esta página web. A todos ellos, mi agradecimiento

Giuseppe Verdi, nació el 10 de octubre de 1813, en la localidad italiana de Roncole-Busseto, situada a 70 kilómetros de Milán, y falleció en un hotel de dicha ciudad el el 27 de octubre de 1901. Con motivo del centenario de la muerte del compositor llevé a cabo, acompañado de la fotógrafa Blanca Berlín, un periplo por los llamados "lugares verdianos". Jamás olvidaré lo que nos sucedió aquel 31 de octubre del año 2000, cuando visitamos "Villa Verdi", residencia del compositor durante treinta años y ahora convertida en parte en museo.

Lo cuentan Clara Tahoces y Stefano Panizza en sus respectivas páginas web. También en el programa "Cuarto Milenio", de Iker Jiménez, me hicieron una entrevista que puede verse en El fantasma de la casa Verdi Cuarto Milenio, al igual que Javier Sierra en su programa El otro lado de la realidad y Javier Sarda en Crónicas Marcianas.

En una caja fuerte conservamos las cinco diapositivas que originaron este curioso "misterio". Nadie nos ha podido dar una explicación racional y convincente sobre el mismo, por lo que las preguntas de entonces siguen vigentes: ¿Quién es esa figura enigmática e inquietante que mira a la cámara? ¿Cómo quedó plasmada su imagen en la diapositiva?...

Si les tienta la idea de acercarse a Villa Verdi, les sugiero que lean el capítulo de mi libro VIAJES PARA MITÓMANOS, titulado “Parma: por tierras de Verdi”, para situarse mejor en el escenario. Y además, una advertencia: conozco a muchas personas que ya lo han hecho a lo largo de estos últimos 15 años y han preguntado por "il fantasma" al guía o a la guía de turno. Sonreirá y les dirá que todo es una fantasía. Y apurando más es posible que una de las guías les aclare que las manos del fantasma son sus manos y que la figura que se perfila es la de un periodista español... que soy yo. En Busseto también se dice que la figura retratada es la de uno de la localidad que años atrás trabajó en Villa Verdi. Él mismo lo sostiene, pero no es verdad. No le vimos en nuestra visita y no trabajaba por aquellas fechas en la Villa. Un amigo mío, pronunció hace años una frase que viene a ser una maldición: "Morirás sin saber quién es".

Pero tampoco conviene exagerar. Lo del fantasma no deja de ser un incidente, una anécdota curiosa y misteriosa compartida con miles de personas. Pero, sinceramente, preferiría que me conociesen por mis escritos, por mis libros de relatos y viajes, por mis guías turísticas. En alonsoibarrola.com podrán conocer al autor y a través de mi página de autor en Amazon.es adquirir los libros reeditados en formato electrónico.